Ed van del Elsken fue un fotógrafo y cineasta holandés nacido en 1925 en Ámsterdam. Realizó sus obras principalmente en blanco y negro e hizo de las subculturas europeas, de la juventud y del amor sus campos de observación.

Sus fotografías muestran el romanticismo de lo cotidiano, una mirada documental a la diversidad y la individualidad del ser humano.

La fotografía como expresión sentimental

Cursó estudios artísticos en su ciudad natal, donde comenzó a trabajar en un taller fotográfico. Su valía le hizo convertirse en reportero de un periódico holandés en París, donde desarrollaría su personal estilo a base de fotografiar los ambientes nocturnos y bohemios de la ciudad.

Matchmaking Para mentes abiertas y reflexivas

Allí comenzó a trabajar en los años 50 para Magnum Photos y para What a time!, primera agencia que permitía a los artistas conservar sus derechos de imagen. Y en esta etapa publicó una de sus obras más destacadas, Een liefdesgeschiedenis in Saint Germain des Prés (Una historia de amor en Saint Germain des Prés, o Love on the left bank, como se publicó en su edición inglesa), que vio la luz en 1956. Esta obra es una original mezcla de fotografía documental y textos de ficción que narra desde la mirada de un inmigrante mejicano la vida contracultural parisina, sirviéndose de imágenes de sus salidas con amigos y sus relaciones sentimentales. Las imágenes recogían la esencia del ambiente existencialista que reinaba en París en el momento, entremezclándolas con otras de carácter íntimo y sexual.

Ed van der Elsken y el romanticismo en blanco y negro

Las imágenes de parejas enamoradas fueron una constante a lo largo de su carrera, aunque retrató con la misma pasión temas de lo más diversos, como músicos de jazz, las protestas civiles por la ocupación soviética de Hungría o la de Vietnam, la matanza de elefantes en África Central o la vida de sociedades exóticas. Era esa diversidad la que él amaba, considerándolos a todos “su pueblo”.

Sus imágenes, obtenidas en su mayoría solo con iluminación natural y con la fuerza propia del blanco y negro, eran sinceras, crudas, casuales, pero tremendamente potentes. Ed van der Elsken fue, de alguna manera, un precursor de la actual sociedad de la imagen que captura fotográficamente cualquier momento, mostraba un afán de documentar cada aspecto de la existencia que le llevó a afirmar que “me hubiera gustado transportar mi cámara en la cabeza para grabar permanentemente el mundo que me rodea”. Y llevó esta máxima hasta su extremo más íntimo, pues una de sus obsesiones recurrentes fue fotografiarse a sí mismo con sus parejas en escenas intimistas y sensuales.

Ed tuvo tres esposas a lo largo de su vida y todas pasaron a formar parte de su obra al ser retratadas por el artista. Su primera mujer, la fotógrafa húngara Ata Kandó, fue esencial en su faceta parisina y protagonista de muchas de sus imágenes más románticas. Después regresó a Holanda, pero nunca dejó de hacer viajes en los que retrató todo cuanto le rodeaba y amplió sus horizontes creativos con la ilustración y el cine.

En los últimos años, su figura como fotógrafo ha sido celebrada con importantes retrospectivas, y artistas contemporáneos de la imagen como la estadounidense Nan Goldin o el alemán Wolfgang Tillmans reivindican el peso de van der Elsken en la historia de la fotografia por el impactante carácter directo y auténtico de sus instantáneas.

En definitiva, estamos ante una destacable figura que tuvo la capacidad de saber mirar a la cotidianeidad de frente extrayendo su esencia vital, sensual y romántica. Un hombre que entendió la vida y la fotografía como sinónimos y que hizo de las relaciones sentimentales su inspiración elevando al amor a la categoría de arte.

Fuente de información:

http://www.anothermag.com/art-photography/9729/the-dutch-photographer-who-inspired-goldin-and-tillmans

https://es.wikipedia.org/wiki/Ed_van_der_Elsken

commons.wikimedia.org